domingo, 27 de septiembre de 2009

Las Aventuras de Pipi Gorrión - Parte II

Al cuarto dia de vida sucedió algo inesperado en Pipi. Ella estaba en su caja pero tenía compañía: a su lado encontramos cuatro gusanos blancos blandos, de 1cm de largo, que se movían y retorcían. En ese mismo momento, me di cuenta de que esos gusanos habían salido de su cuerpo, ya que la caja estaba cerrada y no habia manera de que se metieran por otro lado. Esto nos hizo recordar al primer día que la vimos a Pipi, cuando nos dimos cuenta de que tenía unos bultos blancos en el cuerpo, pero al ser tan chiquita y sin plumas pensamos que podrían ser glándulas o sus órganos en formación. No habíamos visto movimiento por lo que no nos asustamos. Pero cuando vi que estaban afuera de su cuerpo me di cuenta que Pipi estaba engusanada. En ese momento inferimos que quizás su madre la dejó por estar enferma. Llamamos inmediatamente a nuestro amigo veterinario y nos dijo que se trataba de una Miasis. Esta es una foto de Pipi con las larvas:

Fledgling Passer Domesticus with Miasis
Pipi con Miasis

Las miasis es una enfermedad en donde encontramos los huevos de las moscas en una herida húmeda, que drena, con la piel cáida o mantos mojados con la orina. Los moscardones de la familia Calliphoridae y Sarcophagidae son los más comunes en las miasis de los animales pequeños. Las larvas encontradas en estas heridas son muy destructoras y producen lesiones extensas con orificios redondos “taladrados” en la piel que se van uniendo y formando heridas mas grandes. Las larvas pueden estar alojadas debajo de la piel o en los tejidos y generalmente se localizan alrededor de la nariz, ojos, boca, ano y genitales o adyacentes a las heridas descuidadas.

El tratamiento se basa en la limpieza de la herida. Se debe aplicar povidona yodada en las heridas y la larvas deben extraerse manualmente con una pinza evitando que se rompan al sacarlas. Pueden encontrar más información sobre Miasis en este link: http://www.tiendanimal.es/articulo.php?id=31&categoria=19. Hay que tener sumo cuidado al momento de extraer las larvas para no lastimar la piel del pájaro y asegurarnos de que las larvas salgan enteras.

La clave para entender y tratar la miasis es la siguiente: las larvas necesitan oxigeno para vivir, es por eso que se asoman por los orificios para obtenerlo. Es ahi donde nosotros tenemos que intervenir tapando los orificios para forzarlas a salir.¿Cómo hacemos eso? Mojamos un hisopo en agua oxigenada y lo colocamos en las heridas para sofocarlos. Cuando hicimos esto vimos cómo las larvas se movían de un lado para el otro y en el momento en que se asomaron hacia afuera las fuimos sacando con la punta de la pinza. Las más grandes fueron difíciles de sacar, porque estaban atoradas en lugares estratégicos como el cuello o debajo de las alas. Pipi mantuvo la calma durante este proceso tan delicado. Se quedó quieta y nos miraba, como si supiera que la estabamos ayudando. No pio ni se movió, simplemente nos dejó hacer el trabajo. La larva más complicada de quitar fue una grande en el cuello, muy pegada a su cabeza, y era la más peligrosa por estar en una zona sensible. Tuve que sostenerla de la cabeza delicadamente y hacer presión hasta que la larva salió despedida por la cueva que había construido dentro de su piel.

Al terminar con todas, desinfectamos las heridas con Povidona Yodada 10% utilizando el hisopo suavemente. Durante los dias que siguieron, le desinfectábamos las heridas mojando un hisopo en agua oxigenada dos veces al dia. ¡Y esta es Pipi dos semanas después sana y salva!

Healthy Fledgling House Sparrow
Pipi sana y salva luego de la extracción de las larvas

Resumiendo:

  • La aparición de bultos blancos por debajo de la piel es signo de miasis. Tratar con agua oxigenada para lograr extraer las larvas, utilizando una pinza, previamente desinfectada (el agua oxigenada les limita su capacidad de obtener oxígeno). Luego aplicar Povidona Yodada 10% para curar las heridas con un hisopo.
  • Desinfectar las heridas con agua oxigenada dos veces por dia para evitar la infección de las zonas sensibles, hasta que veamos que han cicatrizado.
  • Las larvas generalmente se localizan alrededor de la nariz, ojos, boca, ano y genitales o adyacentes a las heridas descuidadas.
En el próximo post veremos:
  • Aprendizajes en relación al agua y comida.
  • A no confundir el buche lleno con Miasis.
  • Cómo darnos cuenta de la consistencia equilibrada de las heces.
  • Adaptaciones progresivas a su entorno natural.